Opinión

Pistas del aeropuerto

Pistas del aeropuerto

abr. 15, 2018

Este es el artículo de Sergio Alonso Reyes publicado hoy en el diario Canarias 7.

El nuevo giro de la guerra de Siria ha obligado a los aeropuertos de Europa del Este a cambiar los horarios de los vuelos comerciales, lo que nos demuestra la importancia de disponer libertad de acción para las fuerzas aéreas en caso de conflictos.

Me atrevo a iniciar, de esta manera, este artículo para que la opinión pública canaria profundice sobre los riesgos de frenar la construcción de la nueva pista del aeropuerto de Gran Canaria.

En la actualidad existen dos pistas no operativas simultáneamente, lo que significa que, en la práctica, podríamos decir que tenemos una sola, con la única ventaja que se pueden reparar sin interferir en las operaciones de la pista paralela.

Una vez que tenemos claro que a todos los efectos, operativamente, sólo tenemos una pista, es imprescindible recordar que la base aérea colindante, como es natural, tiene preferencia de uso, ya que forma parte fundamental para la defensa del archipiélago y el Atlántico Medio, además de ser miembro de la OTAN y por lo tanto, estar sujeta a las operaciones de la misma. Sin embargo, las fuerzas aéreas, al menos que yo sepa, han sido muy respetuosas con la condición de aeropuerto turístico, de manera que los ciudadanos no percibimos la importancia estratégica de dicha base.

Ante el argumento de que el aeropuerto tiene slots (espacios) libres, hay que pensar que, cuando los peluqueros tienen muchos clientes que quieren pelarse a la misma hora, no les dicen a esos clientes que vengan a la hora que les conviene a los dueños del negocio, sino que buscan la manera de satisfacer a sus clientes. Pues eso es lo que tenemos que hacer nosotros con la, para mí, segunda pista.

Otro aspecto que deberíamos tener en cuenta es que, para que las pistas puedan trabajar de manera independiente la distancia entre ellas debería ser, medida entre ejes, de 1.310 metros. Yo soy partidario de medir esa distancia desde la actual, más cercana a la terminal, y no escatimar el espacio libre que podría, y debería, ser utilizado como taller de mantenimiento y reparación de aeronaves. Esa inversión sí que sería tremendamente rentable para la isla que lo consiga.