ESTE BLOG Y LAS OPINIONES AQUÍ VERTIDAS CONSTITUYEN UNA HERRAMIENTA DE DEBATE Y NO EXPRESAN LA OPINIÓN OFICIAL DEL CÍRCULO DE EMPRESARIOS DE GRAN CANARIA.
Se ha extendido el mantra de que las empresas en España pagan pocos impuestos. Y que en el caso de las grandes corporaciones, estos no llegan al 7%. Este dato es falso. Diversos miembros del CÍRCULO DE EMPRESARIOS DE GRAN CANARIA han sostenido en repetidas ocasiones que la realidad es muy distinta. Evidentemente, si así fuese, competiríamos con Irlanda a la hora de atraer empresas. Y eso que este país grava cuenta con un tipo impositivo del 12,5%.
Estas constantes noticias sobre la alta tributación persiguen, como es lógico, convencer a la opinión pública de la necesidad de subir los impuestos a las empresas, sobre todo a las de mayor tamaño.
Un reciente informe de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) desmiente la falsedad de estos datos. En realidad, los grupos empresariales pagaron en 2014 el 19,2% de impuesto, porcentaje mucho más alto que el 6,9% sobre resultado contable tan repetido, y más similar al de las empresas individuales que fue un 22,5%.
¿La explicación más plausible? Por lo general, se suele tomar el resultado contable de las empresas a la hora de calcular el tipo efectivo que pagan en en concepto de impuestos. Así, las empresas individuales (por lo general pymes) obtuvieron en 2014 un resultado contable positivo de 89.785 millones y pagaron 12.470 millones, el 13,9%. El resultado contable positivo de los grupos consolidados (las grandes empresas) asecendió a 96.218 millones, con una cuota líquida de 6.609 millones. Es decir, el referido 6,9%.
El problema radica en que el Impuesto sobre Sociedades no se calcula sobre el resultado contable, sino sobre la base imponible positiva. Si se toma este dato correcto, los grupos empresariales pagaron en 2014 el 19,2% de impuesto, porcentaje mucho más alto que el 6,9% sobre resultado contable tan repetido, y más similar al de las empresas individuales que fue un 22,5%. El tio real de las grandes empresas que también tributan en el extranjero es mucho más alto: del 21%.
La base imponible, conviene recordar, se calcula aplicando al resultado contable los ajustes extracontables que establece la misma Ley del Impuesto.
El tipo de las grandes empresas es menor debido, en primer lugar, a la exención por doble imposición (para no tributar dos veces por los beneficios obtenidos en el extranjero) y los ajustes por consolidación, que evitan que la matriz pague dos veces por el bemeficio de filiales.
Cabe preguntarse llegados a este punto: la recaudación tributaria de las empresas, ¿es alta o baja? Desmedidademente alta. Aquí está la prueba. Según los datos de la CEOE, la recaudación acumulada publicados por la Agencia Tributaria, ascenderá en 2016 a 188.000 millones, lo que convertirá este año en el segundo mayor de la historia, por encima de 2006 y por debajo de 2007. Y eso, a pesar de que el nivel de actividad económica es muy inferior a estos dos ejercicios pre crisis. ¿Y aún se quiere ahogar más a las empresas subiendo el Impuesto de Sociedades?
