Opinión

Carta abierta al alcalde de Las Palmas de Gran Canaria

Carta abierta al alcalde de Las Palmas de Gran Canaria

oct. 12, 2015

Agustín Manrique de Lara, miembro del CÍRCULO DE EMPRESARIOS DE GRAN CANARIA y presidente de la Confederación Canaria de Empresarios ha publicado en el diario Canarias 7 una carta abierta al alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo. Este es su contenido íntegro.

 

"Debatir sobre el futuro es algo siempre apasionante, algo que todos hacemos continuamente con nuestra mejor intención. Los que tenemos la suerte de hablar en libertad, con muchas y muy diferentes personas cada día, acabamos siempre descubriendo, al menos esa es mi mejor experiencia, que a la inmensa mayoría nos une la búsqueda de un futuro mejor.

Con ese talante te dirigiste a las organizaciones empresariales en la visita que hiciste a nuestra sede antes de las elecciones municipales del pasado 24 de mayo que te llevaron a la Alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria.

Tu discurso amable y conciliador fue bien recibido por los numerosos representantes empresariales que asistieron a la reunión. Hablaste de la legislatura del consenso y el diálogo, términos que compartimos.

Desde entonces, alcalde, te seguimos con respeto desde la distancia. Han pasado ya tus primeros cien días de gobierno y no hemos tenido la oportunidad de volver a intercambiar puntos de vista sobre el futuro de la ciudad, especialmente sobre el futuro económico de Las Palmas de Gran Canaria.

Sin embargo, sí que hemos visto y leído algunas actuaciones y declaraciones exacerbadas de miembros de tu equipo que nos inducen a pensar que tus buenos propósitos podrían ser hoy un espejismo.

En nuestro ordenamiento jurídico no caben las amenazas ni los excesos, correspondiendo a los deberes públicos garantizar y proteger la libertad de empresa en el marco de la economía de mercado.

Quiero centrarme en esta carta en uno de los objetivos fundamentales que te marcaste para tu mandato: «impulsar el necesario desarrollo económico para favorecer el empleo».

Nos gustó escuchar, en tu visita a la Confederación Canaria de Empresarios, que tenías claro que para aliviar nuestra principal preocupación, el paro, solo existe un camino, incrementar la actividad económica, más tejido empresarial.

Entre enero de 2008 y 2014 se destruyó en Canarias mucho tejido empresarial, cerraron casi 15.000 empresas, ése es el origen del grave en indeseable síntoma que es el desempleo. Pero pocas veces escuchamos debates sobre cómo facilitar que se cree tejido empresarial, cómo atraer nueva inversión, cómo incentivar el espíritu empresarial... éste, como tú nos dijiste, es el único camino.

Para todos, y así lo dicen las encuestas del CIS, el empleo es lo más importante, lo que más preocupa a los españoles, por eso, para ser coherentes, todos debemos reclamar que ninguna norma, ninguna ley, ni su aplicación, obstaculice la actividad económica innecesariamente, especialmente en lo que a creación de pequeñas y medianas empresas se refiere. Crear y consolidar empleo, créeme, es muy arduo, destruirlo es mucho más sencillo.

Ni siquiera un objetivo tan noble como hacer campaña electoral, justifica que se ponga en riesgo un solo puesto de trabajo. Las Palmas de Gran Canaria necesita el mejor marco para que se desarrolle la tan deseada actividad económica, para que alcancemos las cifras de empleo que todos deseamos.

Alcalde, te corresponde la responsabilidad de encauzar el clima generado recientemente en la ciudad más importante de Canarias. Debes hacerlo por el bienestar de los ciudadanos de Las Palmas de Gran Canaria, a los que no les gustaría ver cómo se deterioran sus expectativas en beneficio de otras ciudades o regiones.

Las buenas relaciones institucionales entre el Puerto y la ciudad, la creciente diversificación económica en base al turismo de crucero, nuevas actividades portuarias, el impulso dado al mejor posicionamiento internacional de la ciudad para ser receptora de inversiones, o el auge de la ZEC, por poner algunos ejemplos, han mejorado de forma considerable las posibilidades de que se genere tejido empresarial y empleo en Las Palmas de Gran Canaria.

Es más que suficiente con que tengamos un marco favorable a la actividad económica, seguridad jurídica, garantías de libre competencia bajo el estricto cumplimiento de normas claras y sencillas, ausencia de planificaciones rígidas, de intervencionismo económico o de actitudes desconcertantes que provocan desazón en los emprendedores. En definitiva, que nos dejen trabajar en un marco en el que la inseguridad jurídica tenga una correcta traslación a la realidad.

Soy de los que cree en el debate, y estoy convencido de que de las diferencias puede surgir un camino común hacia un futuro mejor, del que todos, desde la responsabilidad que tengamos en cada momento, seamos partícipes. Comparto la idea -y es expresión tuya de que «juntos tomaremos mejores decisiones».

Cuenta con nosotros para recorrer juntos, con optimismo y permanente diálogo, el ambicioso camino que tenemos por delante".